Inocencia de raza, o mirada a la africanía desde la óptica del pincel

Yunior Rojas Ferrer, joven
pintor de Cabaiguán.

La imagen del negro nos aparece por vez primera en la Pintura Cubana con el habanero Nicolás de la Escalera (1734-1804) quien lo pinta en una de las pechinas de la Iglesia de Santa María del Rosario, construida después de mediar el siglo XVIII.

Después muchos artistas siguieron la iniciativa, un paso importante fue el que dio el pintor vasco radicado en la Habana desde 1850, Víctor Patricio de Landaluce quien nos muestra personajes que eran parte de los llamados en la época “pardos y morenos” o sea, mulatos o negros, esclavos o libertos en sus labores habituales en la ciudad.

La herencia pictórica de aquellos artistas cae en las manos jóvenes del cabaiguanense Junior Rojas Ferrer, quién da el primer paso con la exposición Inocencia de Raza, que lo estrena, no solo como artista de la plástica, sino también como estudioso de la africanía.

“Desde que comencé a trabajar para esta exposición me propuse que las obras fueran anzuelos para pescar al espectador desde una mirada rápida a una mirada más profunda, a través de la cual se condujeran a un estado psicológico y espiritual superior al que están en el momento en que recepcionan la obra y que de alguna manera sea esto un instrumento de mejoramiento humano”.

Según el pintor Noel Cabrera “Junior, se las ingenia para hacernos cómplices de las travesuras y las sonrisas de estos niños, (angelitos negros) con una gran preocupación por la forma, empleando el color en función de esta, de manera que no surja polémica alguna”

Los cuadros de Junior, quizás por la habilidad casi calcada para reproducir escenas y figuras y el acertado uso de determinados recursos simbólicos, trascienden el espacio puro del arte para inundar los predios de la más efectiva comunicación. Es un diálogo plural con los seres humanos y sobre ellos, lo que soporta las paredes de la galería de arte en el cine teatro de la ciudad de Cabaiguán.

Cabrera, considera también, que en la obra de Rojas Ferrer, “Este, utiliza la monocromía con tonos neutros para acentuar el concepto, dejándonos el sabor de futuras propuestas más agudas”. Es visible en los cuadros del joven exponente de la pintura, la recurrencia a la fotografía, que une a imaginaciones personales cuestiones que enlaza a partir de los recursos académicos aprendidos.

Por Aramis Fernández Valderas                      correo: aramisfdezval@gmail.com